LA PARRA SE APAGA

La Parra está pocha. Ya ayer estaba con 38,5 de fiebre. Pero como es culo inquieto, hoy no parado. Y su genio se engrandece conforme se apaga. Pero lucha y trata de sonreir. Y ha estado en la fiesta de Reyes de la Petarda. Y la Petarda ¡ha sido capaz de darle un beso al rey mago!. Ahora la moda es decirle: "voy a llamar a los reyes para que rompan tu carta" y se pone a llorar. Es gracioso. Y los análisis en algún lugar entre nuestra ciudad y Barcelona. Todo un poco gris.

Y el que suscribe se ha pasado desde las 12,00 hasta las 16,00 horas.... ¡para hacer una visita!. He batido todos los records de inoperancia, pérdida de tiempo, improductividad, desperdicio... en realidad no tengo palabras para describir el estado de ánimo. Paciencia.

Y mañana el día promete ser interesante: la manada tiene peluquería. El que suscribe, el Rubiales (pobrecito, con lo bicho que tiene el pelo), la Petarda creo que se libra y la Parra. Es divertido ir todos a una como fuente ovejuna. Y a la comida con los amigotes, ya veremos si viene la Parra. Me veo con la jauría y los amigotes salvando la situación.

En fin, por ser un poco positivos, hoy les hemos dado a las profes del Rubiales un detalle. Se lo he entregado a él y le he dicho: "se lo das a Isa (la profe) y le dices que es un soborno". Y el otro que no se corta un pelo, cuando entramos en el cole le dice: "IIIIIIIIIIIsaaaaaaaaaaaaaa. Toma. Es un zogorno". "¿un qué?" me pregunta. Y él contesta a berrido limpio: "un zoooooogoooooornoooooo". Y le aclaro: "Isa que es un soborno. Cosas del niño". Y se ha reido bastante.

Y María ya ha terminado las clases hsta el año que viene. Más paciencia.