CONSECUENCIAS DE SAN BICHO

Hoy hemos celebrado San Bicho. Y ha tenido consecuencias importantes.

La primera es que se han acostado a las 22,56 de la noche, emocionados con tanto trasnochar. Agotados de tanta intensidad. Emocionados de tanta actividad.

En honor de San Bicho hemos cenado en el bar de la piscina, y les encanta. A nosotros los padres no tanto, ya que no es barato, pero un día es un día.

La segunda es que tenemos dos nuevos habitantes en la casa: Doris y Nemo, es decir dos peces con su correspondiente pecera. Pecera a la que hay que cambiarle el agua todos los días y que la Parra les da una semana de vida en esta casa. Ya cuando estaban ubicados en su nueva casa, el Bicho se ha dedicado a decir: "¿por qué no se mueren ya?", o sea que él miso piensa que van a durar poco. A la hora de dormir pretendía llevarse los peces a la cama y he tenido que explicarle que en la cama es seguro que se mueren y que tienen que dormir. Pero la risa les ha entrado cuando les he explicado que lo negro que flota en la pecera es la caca de los peces, porque son pequeños y no saben ir al cuarto de baño y que tenemos que construirles un cuarto de baño.

Y claro han sido demasiadas emociones en un sólo día. El motivo de los dos peces que Champú ha pedido un pez a cuenta de su santo que es en septiembre. Y se lo hemos concedido.

Como colofón, cuando entrábamos en casa, Champú ya un poco cansada de tanto San Bicho, se ha dedicado a decirle al celebrante: "ja, ja, ja, ja, ya es de noche, ya no es tu santo, se ha acabado el día". Y cosas por el estilo. Pero como el otro tenía a su Nemo le importaba una friolera.

Y mañana a piscinear que son dos días. Hasta mañana.