CENA TRANQUILA

Con la que está cayendo, es lógico pensar que nos hemos pasado la tarde en la piscina. A remojo y muy a gustito. Antes, la Parra -por la mañana- se ha ido con Wipiyaya a tasar a Torrevieja, y cuando estaban llegando se han dado cuenta que no llevaban el material de tasar, por lo que han tenido que dar media vuelta y volver a ir a hacer la visita. Cosas que pasan a veces.

También antes la Parra ha conseguido que un bol lleno de pimientos volara por la cocina para impactar contra el suelo rompiéndose en mil pedazos. Que a las embarazadas se les caen las cosas de las manos, no es un mito; es una realidad contrastable y que ella misma, asumida ya su condición (lleva ya cinco años embarazada) os puede contar.

Pero lo más impactante de hoy ha sido en la cena. Yo me he encargado de Ronron y la Parra del Bicho. En contra de lo que suele ser habitual ha sido una cena relajada, sin gritos, divertida, pacífica. Tan pacífica y tan tranquila, que la Parra se ha quedado dormida dandole la cena al Bicho. Sí habeis leido bien, ¡¡¡¡al Bicho!!!!. Ha empezadso a dar cabezadas y era tan tierna la imagen de una mujer derrotada a las 19,30 de la tarde que nos hemos callado todos mirándola. Y ella tan a gustito, cayendole la cabeza. Ha sido medio minuto, un minuto como mucho, pero le ha sentado tan bien....

Y os pongo unas fotos que les he hecho en el coche cuando he ido a por ellos al colegio. Tan locos. Tan divertidos....

Hasta mañana