Y EL DE LA PARRA TAMBIEN

Como si fuera la peste, el ordenador de la Parra ha sufrido un mal. Se nos ha ido, y aún no sabemos si definitivamente. Ahora que yo ya había conseguido ponerme al día, después de estar 74 minutos al teléfono con un sr informático que sabe mucho y vive de eso, resulta que el de la Parra se nos va. ¿Por qué justo ahora? ¿Por qué no dentro de un mes o dos?

Pero nos hacemos fuertes ante la adversidad. Aunque no lo pretendan, hemos conseguido enviar el trabajo puntualmente y para meñana tenemos otro carro de tasaciones que nos alegran el día y la noche, ya que como andamos escasos de medios, hacemos lo que podemos. Pero ¡¡¡triunfaremos a pesar de los pesares!!!.

Hoy ha sido un día normal y corriente. Salvo que Autocad y windows Vista no son compatibles, que el antivirus que tenía es también incompatible y que he conseguido que la impresora y el ordenador -de la misma marca- se entiendan.

Los enanos contentos de ir al cole, y nosotros también. Se lo pasan bien. Y nosotros también. Así todos contestos. La única que no es feliz es Ro, que suspira por salir a la calle, llora cada vez que sale alguien a la calle. Y encima ha aprendido a ponerse de pié en el sofá y se ha metido un trastazo digno de fotografiarse, sino fuera porque los male sinformáticos me lo impiden. Pero como el chichón promete que estará tiempo, mañana le haré una foto.

Y mañana más que aúntengo que enviar otra tasación.