miércoles, 4 de febrero de 2009

LA ALEGRIA DE SER ÉL MISMO

Cuando un hijo recupera la vitalidad, te agota. Pero es un agotamiento que alegra. Daba tanta pena verlo apagado o fuera de cobertura que de verdad es mejor que lo desmonte todo, corra, chille, no deje descansar a Ro....

La idea que tenía en mi cabeza, estando como estaba la Parra dormida a primera hora de la mañana era deportarlo al Cole. A todos. ¡Ya está bien! Pensaba para mí. Que el cole cuesta pasta y éstos en casa no son productivos y nosotros tampoco. Y el Rubiales apagado me decía: "quiero momiiiiiiiirrrrrrrrrrr" Y yo, "si en el cole se lo dices a Isa y duermes", firme, con esa firmeza de quien no quiere tener una rendija abierta a la piedad. Y os aseguro que el Rubiales lo que da ahora mismo es lástima. Con decir que ésta mañana pesaba 10,5 kilos.... se ha quedado en nada.

El caso es que mientras la Petarda me decía: "no quiero desayunar me duele la barriga", y yo, "pues come lo que quieras y ya está" y pensaba: "otra que se quiere escaquear del cole, pero vamos aquí todo el mundo al cole".

Todos con el uniforme puesto. Me estoy duchando mientras la Parra ultima los preparativos de salida.... y se acabó la firmeza. Y el uniforme del Rubiales, y el suelo, y el armario. Vomitada al canto. Otro día en casa. Y la Petarda que es capaz de salir dos minutos del cuarto de baño: diarrea y diarrea que te crio. ¡¡¡Por Dios que tétrico espectáculo el que muestro!!! Pero era el de las 8,35 am del día de hoy. A la Petarda parece que se le pasa. Al cole. La pobre ha entrado a la carrera en el cole porque tenía "diaea". Y por lo que se ha visto a la salida, la pobre no ha llegado al baño. Y aún he tenido que bajar del coche y decirle a las torpes de las profes de la entrada que fuesen a ver qué le pasaba a la Petarda, que pasa una niña a la carrera llorando por su lado y como si pasara una hormiga. ¡¡¡Por Dios, que nervioso me ponen esas cosas!!!.

Y el Rubiales ha pasado de la modalidad de arriba por la de abajo. Para que os hagais una idea desde que he comenzado a escribir esto, ya le he sacado de la cama y cambiado tres veces. Y estas tonterías las suelo escribir en cinco minutos (si no me interrumpen) más o menos.

Pero la modalidad de la parte de abajo, parece que le ha liberado. Ha despertado. Se ha activado. Es feliz (menos cuando tiene el bajón que entonces se vuelve a apagar). La única pega es que necesitamos un pluriempleo para pagar los pañales de la diarrea del Bicho.

Y Ro? Pues hoy cuando volvía de dejar ala Petarda me preguntaba la última vez que la pobre salió a la calle. Y no me acuerdo. Y al llegar a casa se lo he preguntado a la Parra, que tampoco se acordaba. Desde luego, es seguro que desde el viernes de la semana pasada, res de res. Y estaba comentando ésto delante de Ro. Y la cojo y la visto. Y cuando he terminado, la muy bicharraca -como si hubiese entendido todo - se va al perchero y agarra su cazadora y me la trae para que se la ponga. Se la pongo, me agarra de la mano y me lleva a la puerta de la calle. Pues para los que conoceis el recorrido, ha ido andando desde casa hasta el estanco, de ahí a la piscina, varias vueltas a la pista de baile y vuelta a casa. Y por la tarde se ha venido a recoger a la Petarda. Y la Petarda feliz.

Como podeis ver menos hacer visitas -que es loq ue nos da de comer - hemos hecho de todo. Al menos no nos aburrimos. Es más nos lo pasamos bastante bien. Pero mañana sí que hay. Y ahora a descansar que hay que reponer fuerzas. Y cambiar más pañales.

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