UNA DOCENA DE HUEVOS

Hoy íba buscando el lugar que teníamos que visitar. La Parra dormía y menos mal. El pasisaje se va empobreciendo poco a poco. Pasamos más allá del barrio de gitanos para llegar al fin del mundo en Elda. Paro en el número señalado. La fachada se cae a pedazos. ¡Glups!. Nos espera en la puerta una señora con bebé en brazos. Menos mal. Da cierta seguridad el pensar que una señora con bebé en brazos no te va a desvalijar, a menos que te lance el niño a la cabeza, que hoy día todo es posible. Casi sin mirar decido ir directamente a la sala de estar - comedor. Me saluda una pedazo de televisión de plasma de las mismas sino más pulgadas que la que hay en esta casa. Pero digital. Y la casa por dentro, con una buena pinta impresionante. reformada, bien puesta. El marido se explica: "es que a partir de esta habitación ya se nos acabó el dinero. Tampoco llegó para la fachada".

Y son buena gente. muy buena gente. Sencillos, de pueblo profundo, de los de las gallinas en el corrar y de plantar tomates y lechugas. Te abren las puertas, los corazones y lo que haga falta. Hago una visita general a la casa, al huerto y al corral. "Pues acaban de poner huevos las gallinas" Hoy es día de compras y me vendría bien llevarme los huevos puestos que está todo muy caro. Y la señora que me contesta: "¿son ustedes pareja?". "No oiga, le contesto. Aquí hay una que manda que es la Parra y es la Jefa y aquí un currito que hace lo que ella dice en casa y fuera de ella". "Pues como debe ser" me replica. "¿Se ha fijado en que acaban de poner huevos las gallinas?" contraataco, que uno tiene su ilusión con los huevos. "No es que el chiquito lleva dos dias sin cogerlos y claro así estan amontonandose". "Pues anda que iba a dejar yo que se amontonasen si tuviera gallinas!!!". El chiquillo s esiente interpelado y va a por los huevos. y había muchos. demasiados para una familia sólo.

Y entonces la señora se explicó: "les preguntaba si eran pareja para darles una docena o dos docenas". "No, no se preocupe, comemos los mismos huevos". Y el éxito llega a su máximo con la entrega de los huevecillos recien puestos.

Y mañana el rubiales al médico, que tiene un eccema muy feo en la cara. A ver que nos dicen. Ya informaremos. Me voy que a empezado el resumen de los Oscar. Mañana más.