lunes, 13 de septiembre de 2010

DIOS EXISTE Y TU ERES EL CULPABLE

Bajo la premisa "todo el que se mueve es movido por otro" Santo Tomás llegó a la existencia de un primer motor o motor inmóvil que no podría ser movido por otro. Es la primera vía de Santo Tomás que si eres de la EGB y el bachillerato te suena y si eres de la ESO, te suena a chino.

Bajo la premisa "todo el que se mueve es movido por otro" en la casa de los Parramanchos sirve para que las hormonas embaraciles de la Parra se desahogen en el primer motor de la casa que soy yo.

Esto viene a colación porque hay veces que hago rabiar a los niños. La verdad -lo reconozco- es que me gusta sacarlos de sus casillas con razonamientos que los vuelve locos. El problema es que cuando rabian las consecuencias son inesperadas: es el efecto mariposa. Le da rabia al Bicho algo, estaba desayunando, se va a su madre, y pone los morros en las sábanas blancas recien lavadas dejando un ratro de chocolate en la zona que más se ve. Y claro, la Parra, que está muy versada en santo Tomás acaba su enfado con un "y la culpa es tuya que le haces rabiar". Y yo para mis adentros siempre pienso: "y con este sencillo ejemplo queda demostrada la existencia de Dios".

Tiene parte de razón, pero parte no. Tiene razón porque yo los hago rabiar. Pero no la tiene porque pr mucho que rabie, el Bicho no puede levantarse de la mesa sin terminar el desayuno; tampoco puede levantarse sin limpiarse y menos arrimar los morros contra las impólutas sábanas recien lavadas. Y es sólo una muestra.

Pero llevada la vçia de Santo Tomás hasta sus últimas consecuencias, se podría decir que la culpa es suya, ya que ella ha parido al Bicho, o a cualquier otro. Aunque llevado más allá habría que concluir que la culpa es de los dos que fuimos losrimeros motores inmóviles cuando decidimos dejar de serlos para concebir cada uno de nuestros hijos. Pero más allá de nosotros tendríamos que culpar de la suciedad de la sábana a nuestros padres que nos dieron la vida sin la cual no habríamos concebido a nuestros hijos. Y nos paramos aquí, donde la culpa ya no es de la Parra ni mía. En cualquier caso, Dios sigue existiendo.

Y por hoy nada más. Mañana será otro día. Que os lo paseis bien.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi tambien me gusta tu blog... lo leo desde el anonimato jejeje

Parramancho dijo...

El comentario anterior no tiene sentido sino explico que he suprimido un comentario de una página de venta de alfombras que dice "buen blog...." y que he suprimido por ser publicidad y no aportar nada. El que quiera publicidad que la pague. Un saludo