miércoles, 29 de octubre de 2008

OIGA TASEME BIEN QUE ME HUNDO

En estos tiempos revueltos, turbulentos las tasaciones se han convertido en una especie de paño de lágrimas de quien solicita la tasación.

Uno recorre la Provincia con su pena de 1,035 euros/ litro (precio de hoy), que va a 90 Km/h para no consumir, que rumia su rollete mental de "sí, sí saldremos de ésta con paciencia".

La otra -la Parra- rumia la crisis desde lo más profundo de su ser, acompañando a su diligente esposo con la alegre música que son las notas continuadas, rítmicas y gloriosas de un sueño que parece no tener fin.

Llegas al lugar de la visita. Hace 3 años no llegaba pronto nadie. Hoy llega pronto todo el mundo. "Nas, nas. Aquí el chofer, aquí la Técnica", mientras la técnica hace esfuerzos por abrir los párpados y trata de saber donde está. "Hola, aquí el arruinado, que les necesita" contesta el sr.

Subes las escaleras. Casa que se cae a trocitos, porque suele concidir que quien necesita el dinero para refinanciar, es ese mismo Sr que no tiene dinero para arreglarse la casa. "Hice la reforma hace 3 años". "Éste se ha debido reformar el balcón por que otra cosa..." piensas mientras pones cara de interés. Y mientras la Parra pregunta - son sus primeras palabras en el mundo de los vivos- para apuntar la dirección: "Estamos en Torrevieja no?". "No cariño, estamos en Villena". Y razón tiene porque todas las autovías son iguales.

Y llega la pregunta del millón. "¿Cuanto está pidiendo?". Hace 3 ó 4 años te hubieran contestado con 20 pisos en la zona que se vendieron un 20 % más de lo que él está pidiendo. Pero claro, hoy día, no se puede engañar a nadie, y con voz de pena dice: "hombre yo necesitaría tropomil, no se si tal y como está el mercado podeis llegar, pero necesito que me taseis bien que me hundo..." y continúa con una historía muy lacrimógena y tremebuca.

Y vuelves a la misma velocidad, con el mismo precio de la gasolina, con el mismo sonido de fondo de la Parra (que no piede una), pero con la sensación que tú en el fondo aún no estás tan mal.

3 comentarios:

Lisa dijo...

solo puedo comentar: ZZZZZZZZ... (aish, que mese cae la babilla)

Anónimo dijo...

Estaba dando gracias a Dios por no estar tan mal cuando me he dado cuenta que mi casa ni está pol reformar, ni nueva ni a semiestrenar. Aún no está. Pero a Dios pongo por testigo que un día seré rico.

Lisa dijo...

yo eso ya lo sabia, bacali. espera que ya verás. Porque tu lo vales.