martes, 24 de noviembre de 2009

DESPISTE

Ayer se me olvidó hacer las Parramanchadas. Lulú se puso a llorar, Ronron salió de la cama y el lio que se montó por la noche hizo que se me pasara lo de Parramanchear.

Bueno. La señora de arriba pide 150.000 euros y no quiere cambio. Como no tenemos dinero, la verdad es que nos da igual que pida 150.000 euros que 1.500.000 el resultado es el mismo. Dice que la Torre no le gusta porque hace mucho ruido y tiene que "subir en ascensor". "Pues sí señora, y menos mal, porque si no existiera el ascensor, tendría que subir usted andando, y un 7º piso es mucho piso". Venía acompañado por un sobrino suyo, que a la primera dijo: "yo de ésta provincia sólo conozco Denia, que es donde tengo amarrado el yate". Y luego al hablar de las obras de la fachada iba diciendo: "por que claro es que esto, como yo soy arquitecto...", y "como arquitecto te puedo decir...", y a las pobres vecinas de arriba les torraba " sí es que al ser arquitecto tengo una posición desahogada", "sí por que en el colegio de arquitectos..." y a mí se me iba hinchando la vena del cuello y las pelotas también con tanta imbecilidad, y al cabo de una hora de pavonearse delante de todos le dije: " mira en mi casa el ser arquitecto es como tener la ESO. Lo digo porque parece que estás muy pagado de tu carrera de arquitectura, y éstas -señalando a las vecinas de arriba que se descojonaban de risa por dentro- saben que mi mujer es arquitecta, que mi suegro es arquitecto, que tengo tres cuñados arquitectos, por lo que ya basta de chorradas. En mi casa ser arquitecto es lo más normal del mundo y mi hija de 4 años cuando hace dibujos dibuja casas, y mis sobrinas planos de distribución y tienen 5 años. La terraza es de tu tía y la vas a pagar y si no nos vemos en los juzgados, porque yo no soy arquitecto pero de juzgados se un rato". El sobrinito -culpable que no se haga el cambio- se pasó una hora intentando recuperar posiciones y buscando algo que hiciera que me hiciera tilín para reconciliarse conmigo y lo consiguió un poco ya que es estudiante de fomento y padre de fomento. Se entiende que haya decidido que el precio del piso es 150.000 euros.

Hoy me envía un piso y me dice que por 23,5 millones de pesetas (que deben ser unos 140.000 euros creo) que me lo vende. así, de pronto, sin avisar.

Total que hemos iniciado la expansión hacia el lado. Comprar piso (estamos en ello, tenemos el sí del banco hipotecante y del banco vendedor que son el mismo banco), convencer a los vecinos de abrir hueco, abrirlo, reformar y ocupar. Lo compra Tovi, y si todo sale bien se lo cambiamos por la Torre (y eso que gana el chaval) y si sale mal se lo queda él.

En fin de momento nada más. Buen martes a todos. A pasarlo bien.

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