PARRANCHORRADAS

Lo primero antes que se me olvide. No comenté la semana pasada que Tovi suspendió el práctico del carnet. Pero es más divertido que hoy se ha vuelto a examinar y el examinador se ha lanzado del coche en marcha ¡¡¡se ha saltado un semáfono en rojo!!! y claro, se lo han pencado otra vez. es gracioso porque al no tener moto le recojo con los enanos y el cachondeo es ya mayúsculo. Hoy al subir al coche hemos empezado todos: "¡¡rojo, amarillo y.....!!" y cosas así.

Pero vamos a lo que vamos. Para los muy parramanchíticos, se habrán dado cuenta que desde el lunes, las Parramanchadas son una porquería, un cumplo y miento, un salir del paso. un no contar nada, porque no hay nada que contar, un no diré más que lo imprescindible. No cuenta lo que pensamos, lo que pasa en la casa. Nada.

Pero es que no puedo contar lo que pasa en esta casa. Lo que pasa por la cabeza de la Parra y la mía, ni en la de los niños: ilusión, esperanza, alegría... No podemos, porque hay que ser cautos y no precipitar acontecimientos, para que se desarrollen poco a poco y las cosas se pongan en su sitio con paciencia. Y claro, luego salen las Parrancacas que han salido.

Y el que tenga ojos para leer, que lea.

Hasta mañana. Nunca ha habido quinto malo. A pasarlo bien.